DESPARASITAR ES IMPORTANTE.

Es frecuente ver en la clínica diaria, que aunque cada vez con menos frecuencia, es bastante común encontrar mascotas que no llevan una pauta de desparasitación interna regular y muchas veces ninguna de desparasitación externa.

Esto es entendible ya que la desparasitación interna es recomendable hacerla cada 3 meses durante toda la vida del animal y la externa, en función del producto utilizado, puede ser incluso mensual…y es fácil perder la constancia.

                                      

No obstante nosotros insistimos en la importancia que tienen estas acciones tanto para nuestras mascotas como para nosotros mismos.

Es cierto que no todos los parásitos internos que tienen nuestras mascotas se transmiten a personas, pero si muchos.

Desde las más típicas lombrices, pasando por las tenias o gusanos planos y llegando incluso a parásitos microscópicos como pueden ser las giardias.

Dentro de las tenias cabe destacar el Echinococcus granulosus responsable de la formación de quistes hidiatídicos principalmente en pulmón e hígado, siendo esta una zoonosis (enfermedad transmitida de animales a personas) bastante importante.

                                

A su vez los parásitos externos a parte de poder afectarnos también a nosotros y de la consiguiente anemia que podría provocar una infestación masiva a nuestra mascota, cabe destacar que son vectores portadores de graves enfermedades que igualmente pueden afectar a personas (por ejemplo leishmaniosis, erlichiosis, babesias, enfermedad de Lyme…)

Muy importante sobre todo es esto en las familias con niños, ya que ya sabemos la relación tan especial que nuestros hijos suelen tener con las mascotas, haciendo que el riesgo de contagio aumente.

                                                                         

Si bien es cierto que hay zonas donde existe una mayor prevalencia de parásitos y normalmente en las zonas de campo se ven más frecuentemente estos problemas, las ciudades no están exentas de los mismos.

Además es relativamente habitual que animales recogidos de albergues, comprados en tiendas o bien en grandes criaderos  presenten parasitosis tanto internas como externas, actuando de fuente de contagio para propietarios y otras mascotas.

Es posible incluso la infestación en útero de un cachorro si la madre presenta parásitos (cómo es el caso de las lombrices….)

También hay que valorar que antiguamente se decía que en los meses de frío no era necesaria llevar a cabo la desparasitación externa de las mascotas (pese a que siempre se ha sabido que las pulgas toleran muy bien el frío y la humedad), pero con el tiempo cada vez más cálido que tenemos estamos viendo que la estacionalidad ha desaparecido prácticamente, por lo que la recomendación es desparasitar durante todo el año.

                    

                

Existen muchísimas opciones de desparasitación tanto interna como externa, que se pueden adaptar a las necesidades y gustos tanto del propietario como de la mascota, así que para más información no dudéis en contactar con nosotros en el 91.642.67.25 o en el 608.52.12.88.